Prueba de autonomía: los coches de gasolina y el transporte público son bastante más caros que los diésel y los eléctricos.
¿Qué medio de transporte nos permite llegar más lejos por nuestro dinero? Una prueba demuestra por qué los vehículos diésel siguen siendo tan populares y que el transporte público no puede ser una alternativa para muchos.
Un estudio realizado por la plataforma de comparación de coches nuevos Carwow en Berlín, Hamburgo, Colonia y Múnich muestra qué medio de transporte nos lleva más lejos... por 5 euros. La prueba incluyó un VW Golf 8 diésel y de gasolina, así como un vehículo eléctrico VW ID.3 y los servicios de transporte público de las principales ciudades. Quedó claro por qué los vehículos diésel siguen siendo tan atractivos: Con un consumo de 3,7 l / 100 km, el diésel es el que más lejos llega, concretamente 129 kilómetros. El e-car también lo hace muy bien, con un consumo de 13,4 kWh / 100 km y una autonomía de 127 km, sólo por detrás del coche diésel. El coche de gasolina lo hace mucho peor: por 5 euros sólo se consiguen 81 kilómetros con un consumo de 5 l / 100 km.
No es de extrañar, pues, que mucha gente siga eligiendo un diésel en lugar de un coche de gasolina a la hora de comprar un coche nuevo.
Sin embargo, el transporte público se queda dramáticamente atrás. Por término medio, con 5 euros sólo se consiguen unos 30 kilómetros. Dado que las cuatro grandes ciudades alemanas de la prueba llevan años luchando contra el exceso de tráfico en las carreteras, así como contra la calidad del aire y la contaminación acústica provocada por el tráfico, esto demuestra la falta de cabeza de las ciudades en sus intentos de atajar el problema. Suelen recurrir a costosas medidas para reducir el tráfico, que se interrumpen al cabo de un tiempo porque no surten efecto. A las administraciones municipales no parece ocurrírseles que esto ayudaría a fomentar y ampliar el transporte público y a hacerlo más atractivo, sobre todo en términos de precio.
Sin embargo, hay un rayo de esperanza: La prueba demuestra que el e-car ya puede mantener el ritmo. Dado que la tecnología de las baterías mejorará probablemente en los próximos años, podría entonces ser aún más eficiente y se situaría así por delante en la comparación de los 5 euros. Queda esperar que no haya sorpresas desagradables con los coches puramente eléctricos, como las hay con los vehículos híbridos, que muestran que el balance de CO2 de los vehículos es significativamente peor de lo declarado por los fabricantes (como se informó la semana pasada).