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¿Bio-GNC como alternativa a la electricidad?

La electricidad sólo tiene una buena huella de carbono mientras no se produzca a partir de combustibles fósiles. La situación es completamente distinta con el biogás, que se produce a partir de materias primas renovables y, por tanto, siempre tiene una buena huella de carbono. ¿Es el biogás la mejor alternativa a la electricidad?

GNC es la abreviatura de "Gas Natural Comprimido" y se obtiene a partir de gas natural fósil. El bio-GNC, en cambio, se obtiene a partir de materias primas renovables. El biometano no sólo es neutro desde el punto de vista climático, sino que además emite durante la combustión la misma cantidad de dióxido de carbono que liberan las plantas durante la fotosíntesis. En comparación con los vehículos diésel, emite un 97 % menos de dióxido de carbono. Pero también se liberan al aire mucho menos nitrógeno y partículas cuando se quema biogás.

El biometano se produce a partir de materias primas renovables y residuos. Se utiliza ensilado de maíz y otros tipos de grano, paja, estiércol líquido o residuos orgánicos. Otra ventaja es que el gas, neutro para el clima, puede inyectarse directamente en la red y no tiene que transportarse en camión hasta las gasolineras. Esto supone un ahorro adicional de combustible. Sin embargo, no todas las cerca de 900 gasolineras que ya ofrecen gas natural ofrecen también biometano al cien por cien. Pero incluso repostar gas natural con un contenido de biometano de sólo el 20% es mucho más respetuoso con el medio ambiente que repostar gasóleo o gasolina.

Un coche que funcione con biometano puede recorrer unos 500 kilómetros, y además el metano es hasta un 40% más barato que la gasolina o el gasóleo. Los coches eléctricos no son necesariamente más contaminantes que los que funcionan con biogás. Pero los coches eléctricos sólo serán un competidor real de los vehículos de biogás cuando la energía para los coches eléctricos se genere al 100% a partir de fuentes renovables. Pero esto todavía está muy lejos en Alemania. Otro punto a favor del biogás es su relativa seguridad. En caso de accidente, el gas se libera simplemente a través de una válvula de seguridad y deja de suponer un peligro porque se evapora rápidamente.

Pero independientemente de si se cambia a un vehículo eléctrico o a uno de biogás, en vista de las numerosas zonas medioambientales de Europa, el cambio es ventajoso. Porque si bien las normativas para los vehículos de gasolina y gasóleo son cada vez más estrictas, no se aplican a los coches propulsados por electricidad o gas.