Ludwigsburg en la lucha contra el ruido
Límite de velocidad 40 en casi todas partes: la ciudad frena a los automovilistas contra la nociva contaminación acústica en toda la zona urbana. Tienen que pagar el precio de las medidas negligentes de la ciudad.
Durante años, la contaminación acústica causada por el tráfico en Ludwigsburg, al norte de Stuttgart, ha sido demasiado alta. Ahora se ha decidido limitar la velocidad a 40 km/h en toda la ciudad. En algunas partes de la ciudad, la velocidad se reducirá aún más: Por ejemplo, en los tramos de Heilbronner-, Marbacher-, Aldinger-, Kepler-, Schwieberdinger-, Schorndorfer-, Ost-, Bebel-, Kurfürsten- y Martin-Luther-Straße, se van a introducir límites de velocidad de 40. En las calles Leonbergerstrasse, Solitudestrasse, Mathildenstrasse, Abelstrasse, Aspergerstrasse, Hoferstrasse y Schlieffenstrasse, así como en la Gänsfußallee, sólo se permitirá circular a 30 km/h. La Wilhelm-Straße queda excluida de las medidas, ya que aquí el tráfico de autobuses se vería demasiado afectado y no podrían respetarse los horarios.
En el barrio de Egolsheim, donde los vecinos llevan años sufriendo la contaminación acústica de la B27, ya se iba a instalar asfalto susurrante, y también se estaba debatiendo la construcción de un túnel, una circunvalación y una barrera acústica. Así que, aunque se debatieron muchas medidas en el consejo municipal, poco ocurrió. A lo largo de este año se decidieron los primeros límites de velocidad: en algunos tramos de la B27, así como en la Friedrichstraße, también porque aquí se habían superado durante años los límites de óxido de nitrógeno. Esto se hizo para evitar no sólo el ruido, sino también la amenaza de prohibiciones de circular con diésel.
Sin embargo, la contaminación acústica en muchas zonas de la ciudad es demasiado alta y, aunque se respeten los límites legales de 55 y 59 decibelios durante el día y de 45 y 49 decibelios por la noche, sigue siendo perjudicial para la salud. "Tempo 40 reduce el ruido entre 1 y 1,2 decibelios, por debajo del umbral de percepción; Tempo 30 lo reduce entre 2,5 y 2,7 decibelios, que entonces sí se percibe", explica Ressler, de la Oficina de Urbanismo y Topografía.
Queda por ver si las medidas de Tempo 40 tendrán un efecto real. Sin embargo, dado que el ayuntamiento lleva años debatiendo otras medidas pero no las ha aplicado, muchos vecinos de Ludwigsburg están descontentos por tener que pagar ahora el desaguisado con el límite de velocidad.