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Francia fracasa en la lucha contra el cambio climático

El país se enfrenta a una multa de 100 millones de euros por exceso de contaminación atmosférica. Ayer venció sin éxito el plazo de dos meses fijado por la Comisión Europea para reducir la contaminación por óxidos de nitrógeno. Al mismo tiempo, un tribunal francés dictaminó que el Estado era en parte culpable de los daños climáticos del país.

A finales de 2019, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) había determinado que los niveles de contaminación por óxidos de nitrógeno en doce ciudades francesas eran demasiado elevados. Entre ellas París, Lyon y Marsella. Tras un año en el que no pasó gran cosa, las exigencias se hicieron más urgentes en diciembre de 2020. La Comisión Europea advirtió a Francia de que tomara "todas las medidas necesarias" para reducir la contaminación por óxidos de nitrógeno en un plazo de dos meses. La UE también había señalado aspectos concretos, como la insuficiente coordinación local-nacional, el bajo presupuesto y la falta de instrumentos fiscales para luchar contra la contaminación atmosférica. El plazo fijado venció ayer.

Francia se enfrenta ahora a una multa de la friolera de 100 millones de euros.

Al mismo tiempo, un tribunal francés dictaminó que el Estado era en parte culpable de los daños climáticos en el país. La decisión se tomó a raíz de una denuncia de Greenpeace, apoyada por 2,3 millones de personas a través de una petición. La sanción resultante no se determinará hasta los próximos meses.

En cuanto a la reducción del óxido de nitrógeno, este año van a ocurrir muchas cosas en Francia. Entre otras cosas, se introducirán de nuevo muchas zonas medioambientales o se endurecerán las normas en las zonas existentes. Para 2023, las pegatinas 3 y peores estarán prohibidas en muchas ciudades y, para 2025, todas las grandes ciudades del país habrán introducido prohibiciones de circulación. Sin embargo, la organización Climate Action Network denuncia que este calendario no es suficientemente estricto y que en los próximos años se seguirá superando con frecuencia el valor límite de óxidos de nitrógeno. La organización también critica que el Gobierno no trabaje por una prohibición general de los coches de combustión, sino que sólo quiera regular paso a paso los vehículos más antiguos con motor de combustión.

Asimismo, la introducción de un nuevo índice climático que mide los picos de contaminación atmosférica y activa así la activación de zonas temporales deja mucho que desear. Aunque las PM2,5, es decir, las partículas finas de polvo más pequeñas, que antes se ignoraban por completo, se han incluido en el índice. Sin embargo, sigue sin utilizarse como factor desencadenante de la activación de zonas medioambientales.

Al igual que Francia, otros Estados de la UE que sigan detectando niveles excesivamente altos de contaminación atmosférica están amenazados con fuertes sanciones por parte de la Comisión Europea. Así pues, la decisión también podría dar lugar a normas más estrictas y a una ampliación de las prohibiciones de circular con diésel en Alemania, por ejemplo, para evitar una denuncia de la UE y evitar sanciones.

Puede encontrar todas las zonas medioambientales permanentes y temporales de Francia en nuestra aplicación Zonas Verdes.