Más de 200 coches utilizan el Jungfernstieg cerrado
El Jungfernstieg en el Binnenalster de Hamburgo está cerrado al tráfico desde mediados de octubre de 2020. Pero muchos conductores siguen haciendo caso omiso de esta prohibición.
Hace casi un año y medio, el Senado de Hamburgo decidió cerrar a los vehículos el popular paseo del centro de la ciudad, entre Gänsemarkt y Ballindamm. Sólo se permite el paso de autobuses y taxis, y la entrada de vendedores entre las 9 de la noche y las 11 de la mañana.
Sin embargo, no fue hasta la semana pasada cuando un control de tráfico a gran escala reveló que la mayoría de los usuarios de Jungfernstieg no tienen permiso para hacerlo. Durante los controles realizados entre las 15.00 y las 20.45 horas, se sorprendió a 207 conductores circulando en ambas direcciones, que ahora deberán pagar una multa de 50 euros. Pero esto sigue pareciendo poco para disuadir a los infractores.
Según el economista Ferdinand Dudenhöffer, los controles de tráfico no bastan. Pide al senador de tráfico de Hamburgo, Tjarks (Verdes), que tome medidas aún más duras. Pide dos o tres meses de controles diarios para que todos los que utilizan el enlace interioricen la necesidad de buscar otra ruta. En segundo lugar, son imprescindibles cámaras que graben automáticamente a los infractores. Por último, propone barreras que sólo se abran para los vehículos autorizados. Al principio con personal, más tarde automáticamente. De este modo, podría conseguirse calmar el tráfico en la calle comercial y reservar el espacio para los peatones y el transporte público local.