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El asesino del clima: escándalo por las emisiones de escape de los híbridos enchufables

Los vehículos emiten hasta 12 veces más CO2 de lo que afirman los fabricantes. Algunos expertos sospechan de dispositivos de desactivación que hacen que los valores medidos parezcan intencionadamente bajos.

Un estudio de la organización Transport and Environment (T&E) expone a los híbridos enchufables supuestamente respetuosos con el medio ambiente como pecadores climáticos. Las pruebas demostraron que los vehículos emiten bastante más CO2 del que figura sobre el papel. Especialmente en modo de carga, es decir, cuando el motor de combustión carga la batería mientras se conduce, se emite entre un 300% y un increíble 1.200% más de CO2. Cuando se conduce con la batería vacía, los valores medidos siguen siendo entre un 300% y un 800%, y cuando se utiliza una batería totalmente cargada de forma óptima, entre un 28% y un 89% más de lo declarado. Los expertos sospechan que, de forma similar al escándalo de los diésel, los fabricantes están instalando un dispositivo de desactivación para mantener bajas las emisiones de CO2 en el ciclo de pruebas.

Los híbridos enchufables están muy subvencionados por el Estado para incentivar la movilidad respetuosa con el medio ambiente. En Alemania, el Gobierno federal destina más de 500 millones de euros a subvencionar los vehículos híbridos. Pero no se fabrican para ser realmente respetuosos con el clima, según el Director para Alemania de T&E, Stef Cornelis. "Los vehículos híbridos enchufables no se fabrican para funcionar de forma limpia en carretera, sino para aprovechar las subvenciones del Gobierno y cumplir los límites del parque europeo".

La subvención de los vehículos híbridos ya había sido objeto de críticas porque estos vehículos rara vez se conducen en modo eléctrico. Según un estudio de la organización Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT), la proporción en los vehículos privados es del 37%, mientras que en los vehículos de empresa el motor eléctrico sólo se utiliza el 20% del tiempo de conducción. En consecuencia, los híbridos enchufables siguen contribuyendo mucho a las emisiones nocivas de partículas y óxidos de nitrógeno.

Las investigaciones de seguimiento demostrarán si los fabricantes manipulan realmente los valores de CO2 mediante dispositivos de desactivación. Sin embargo, ya está claro que es poco probable que estos vehículos contribuyan a una transición de la movilidad respetuosa con el clima.