El aire de Berlín es cada vez más limpio
Se ha cantado mucho sobre el aire de Berlín, pero eso fue hace mucho tiempo. Y entonces estaba lejos de ser sucio. Pero hay motivos para la esperanza. Como se ha medido ahora, nunca ha estado tan limpio desde que empezaron las mediciones en 1975. Los nuevos límites, sin embargo, podrían suponer un reto.
El informe anual de Berlín sobre la calidad del aire muestra que las cantidades de dióxido de nitrógeno y partículas en el aire han disminuido significativamente. Aunque el valor límite de 40 microgramos de dióxido de nitrógeno por metro cúbico se superó repetidamente por un amplio margen hasta 2019. A lo largo de ese año, sin embargo, los valores medidos mejoraron continuamente. Ahora es mejor de lo que ha sido desde que comenzaron las mediciones: se registró una reducción del 16% del dióxido de nitrógeno en los seis puntos de medición.
El mayor descenso se logró en la concurrida Leipziger Strasse, entre Potsdamer Platz y Alexanderplatz: mientras que la contaminación media por dióxido de nitrógeno de Berlín disminuyó entre 6 y 7 microgramos por metro cúbico, en Leipziger se midió un descenso de la friolera de 15 microgramos. Es la primera vez que la ciudad cumple los valores límite. Los datos preliminares, que ya se recogieron en mayo de este año, pudieron así confirmarse. Basándose en los datos de primavera, se levantó la prohibición de circular con diésel en cuatro calles de Berlín. La administración medioambiental es optimista respecto a que la prohibición se mantenga, ya que la disminución en las calles afectadas fue muy significativa, de 30 microgramos por metro cúbico. En cuanto a las partículas, la ciudad también va por buen camino: desde 2015 cumple los valores objetivo de la UE y el año pasado pudo reducir de nuevo la contaminación.
El cumplimiento de los valores demuestra que las medidas introducidas están surtiendo efecto: Prohibición de circular con diésel para los vehículos diésel hasta Euro 5 inclusive, electrificación de la flota de autobuses, límite de velocidad de 30 km/h y, en general, menos tráfico debido a las oficinas en casa.
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya amenaza con nuevos problemas. La OMS ha introducido límites más estrictos y cabe suponer que la UE también seguirá estos valores en el futuro. Eso significaría, sin embargo, que los valores límite en Berlín se superarían 106 días al año. Entonces sólo es cuestión de tiempo que se vuelvan a imponer prohibiciones a la conducción con diésel. Y probablemente no se quedará en unos pocos tramos de carretera.
No se sorprenda por ello. Descárguese la aplicación Green-Zones y manténgase al día de todos los cambios y endurecimientos en Berlín.