La pandemia también está afectando duramente a la industria automovilística. Los sistemas de filtrado de los vehículos diésel antiguos no pudieron instalarse el año pasado como estaba previsto. Así que los vehículos diésel sucios siguen contribuyendo al aire viciado y hacen inevitables las prohibiciones de circular con diésel.
Este año se automatizarán los controles en la Zona de Bajas Emisiones de París. Los conductores que entren en el área metropolitana de París con una pegatina no autorizada podrán ser identificados y sancionados mediante sistemas de cámaras.
Se va a construir una ciudad verde de millones de habitantes en el Mar Rojo, donde no hay carreteras convencionales y los coches están totalmente prohibidos. El proyecto es controvertido, pero podría ser un modelo para dar un giro a la movilidad también en las grandes ciudades europeas.
El año pasado, los niveles de óxido de nitrógeno en el valle del Neckar se mantuvieron por primera vez por debajo del valor límite. Sin embargo, los demandantes, que llevan años haciendo campaña por un aire mejor, lo consideran sólo un éxito parcial. No obstante, las lecturas podrían repercutir en la prohibición de conducir en la ciudad.
Sólo cinco días después de endurecer las normas de la Zona de Bajas Emisiones de Lyon, se ha presentado una demanda colectiva contra las medidas. La distinción entre particulares y comerciantes vulnera la igualdad de derechos de los ciudadanos. Esto podría significar el fin del endurecimiento en una de las ciudades más sucias de Francia.
El servicio de transporte público gratuito y la ampliación del metro ligero hacen más atractivo el uso del transporte público. Otras ofertas ayudan a los ciudadanos a dejar el coche. Por tanto, las prohibiciones de conducir son innecesarias.
Conducir en la capital belga ya no debe ser divertido. La limitación de velocidad en todo el centro de la ciudad es el primer paso para disuadir a los conductores y reducir considerablemente el tráfico.
El grupo parlamentario de la CDU quiere que se ponga fin inmediatamente a las prohibiciones de circular con diesel. La autoridad medioambiental está revisando la medida en primer lugar, pero también está evaluando algunos tramos de carretera para nuevas prohibiciones de circulación. Al mismo tiempo, cada vez más calles se declaran zonas sin coches.
Para evitar las prohibiciones de circular con diésel, la ciudad del Meno está introduciendo una zona de velocidad de 40 km/h en todo el centro de la ciudad. Si esto no surte efecto, es posible que a mediados del año que viene se impongan las impopulares prohibiciones de circulación.
El bloqueo actual provoca una disminución de la movilidad de hasta una quinta parte en comparación con el año anterior. En situaciones de bajo volumen de tráfico, las zonas temporales de bajas emisiones también podrían tener sentido en Alemania.
