La industria del transporte se ha dado cuenta: Con sus pesados cargueros, forma parte del problema de la contaminación atmosférica tanto en las ciudades como en las transitadas rutas entre éstas y los centros de distribución. Mercedes-Benz ha empezado a producir en serie su primer e-truck. Y con ello cuenta con una ventaja decisiva en las zonas de bajas emisiones de Europa.
Uno de los mayores retos a los que se enfrenta la electrificación del transporte es la infraestructura de recarga. Aunque cada vez más conductores opten por un modelo eléctrico, éste fracasará en el día a día debido a la falta de enchufes en la carretera. Una solución son los enchufes integrados en las farolas. En Berlín ya han querido probarlo equipando algunas farolas con enchufes. Londres y Arnhem ya han hecho progresos.
Quien tiene un coche eléctrico en Noruega apenas paga impuestos por él. Esto se aplica al 78% de las nuevas compras realizadas en lo que va de 2021 y al 55% de las compras del año anterior. Noruega lidera así la cuota eléctrica en Europa. Los ciudadanos de Noruega también tienen que darse prisa, porque a partir de 2025 ya no podrán circular por el país turismos ni vehículos comerciales ligeros con motor de combustión interna.
En los Países Bajos hay 15 zonas de bajas emisiones en 12 ciudades. Las tres ciudades más grandes, Ámsterdam, La Haya y Rotterdam, tienen incluso dos zonas. La mayoría de las zonas sólo prohíben la entrada de camiones diésel con Euronorma 3 o inferior. Pero hay excepciones y normas especiales.
Todo el mundo debería conducir coches eléctricos. Pero cuando se trata de dominar el día a día, los coches eléctricos aún suelen llegar a sus límites. Esto se debe en gran medida a la infraestructura, que aún está en pañales en muchos lugares. Los aparcamientos con función de carga prometen una solución. Pero, ¿qué ocurre si un coche se incendia allí?
Los motoristas lo tienen difícil: cada vez más ciudades no quieren dejar entrar a los viejos motores de combustión. A esto se añade el ruido con el que los motoristas se hacen impopulares en muchos lugares. Una encuesta entre motoristas sugiere que en el futuro habrá cada vez menos motos.
El plan de la UE para reducir drásticamente la cuota de coches de combustión interna en Europa no gusta a todos. El Primer Ministro de la República Checa ha anunciado que votará en contra de la prohibición de vender coches que funcionen con combustibles fósiles. Esto podría poner en peligro el calendario de la UE, ya que los 27 Estados tendrían que estar de acuerdo con esta prohibición.
Las estaciones de recarga, independientemente de si cargan rápido o tardan más, no deberían cargar más electricidad de la que recibe el consumidor. Pero esto ocurre con demasiada frecuencia porque muchas estaciones de recarga no están calibradas.
Dos empresas europeas han establecido nuevos récords en movilidad eléctrica. La empresa suiza Futuricum ha demostrado que los camiones pueden recorrer largas distancias sin necesidad de recarga. La empresa Zero Emission Services (ZES) de Rotterdam, por su parte, está revolucionando la navegación interior en el corazón verde de Holanda.
La Comisión Europea se ha fijado objetivos ambiciosos: En julio de este año anunció su objetivo de poner fin a la venta de coches nuevos con motor de combustión interna para 2035. Eso no conviene a todos. En Italia se espera una excepción para los fabricantes de automóviles Ferrari y Lamborghini.
