La Zona de Bajas Emisiones de Glasgow muestra sus primeros éxitos
El largamente debatido endurecimiento de la normativa sobre zonas medioambientales en el centro de la ciudad ya había dado lugar a una mejora de la calidad del aire pocos días después de su entrada en vigor. La concentración de dióxido de nitrógeno en el punto de medición de la concurrida Hope Street se ha reducido en un 27%. ¿Combatirá eficazmente la normativa ecológica -a pesar de las críticas- la contaminación atmosférica en Glasgow?