La Conferencia de Ministros de Medio Ambiente ha votado a favor de un límite de velocidad en las autopistas. Los ministerios de medio ambiente de los estados federados quieren reducir la dependencia de las importaciones de combustible y fomentar la protección del clima. Ahora es el turno del gobierno federal.
Debido a la guerra en Ucrania, los ministros de Medio Ambiente de los Estados federados piden la introducción de un límite de velocidad en las autopistas alemanas. Así se decidió la semana pasada en la Conferencia de Ministros de Medio Ambiente (UMK) celebrada en Wilhelmshaven. Baviera y Renania del Norte-Westfalia expresaron su preocupación por la proporcionalidad y eficacia de la medida. Al final, sin embargo, la decisión se tomó por unanimidad, explica Olaf Lies, Presidente de la Conferencia y Ministro de Medio Ambiente de Baja Sajonia. Nunca antes se había celebrado una votación ministerial de este tipo en la UMK.
"También debemos fomentar la protección del clima mediante un límite de velocidad", prosigue Lies. Con la ayuda de un límite de velocidad también en las autopistas alemanas se darán pasos importantes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, contaminantes y ruidos". La petición de los Estados se justifica también por la necesidad de ahorrar energía ante la guerra de Ucrania. El límite de velocidad es "una medida rentable, rápidamente realizable y de efecto inmediato" para reducir el consumo de combustible y la dependencia de las importaciones. La resolución no especifica un nivel fijo del límite de velocidad exigido. Sin embargo, el político del SPD es partidario de un límite de velocidad de 130 km/h para las autopistas alemanas. "En mi opinión, el exceso de velocidad ilimitado ya no encaja con los tiempos que corren", prosigue el presidente. Ahora es el momento de ahorrar más y utilizar con cuidado los recursos.
La medida debería introducirse inicialmente mientras dure la guerra en Ucrania. Sin embargo, a los ministerios de medio ambiente les gustaría que el límite de velocidad se extendiera y ampliara. A largo plazo, la medida debería ir de la mano de la expansión de la electromovilidad y el transporte público local para replantear la movilidad alemana de una forma más ecológica.
Sin embargo, la resolución de la UMK no tiene un efecto jurídico directo. La decisión está ahora en manos del Gobierno federal, a cuyo nivel no se incluyó un límite de velocidad en el acuerdo de coalición. Aún no está claro si esta vez será posible aplicar un límite de velocidad. La ministra de Economía, Lindner, que ya se había pronunciado enérgicamente en contra durante las negociaciones de la coalición, mantiene su postura y advierte a sus colegas. Según Lindner, sería contraproducente utilizar el argumento de la guerra como razón para anular acuerdos del pacto de coalición.