El Senado de Berlín ha evaluado una prueba modelo en la que se designaron como zonas de 30 km/h cinco vías principales muy transitadas de Berlín. Los resultados de la prueba ya están disponibles: El límite de velocidad 30 reduce las emisiones contaminantes. La capital belga, Bruselas, también está muy satisfecha tras un año de límites de velocidad a 30 km/h.
En la mayoría de las carreteras de Berlín ya se aplican límites de velocidad de 30 km/h, a excepción de las vías principales. Pero en un proyecto modelo, el objetivo era averiguar cuántas ventajas ofrece realmente un límite de velocidad en estas carreteras. El resultado: además de reducir el ruido y aumentar la seguridad frente a escuelas y guarderías, también se reduce el nivel de dióxido de nitrógeno (NO2).
Las mediciones se realizaron en tramos de las calles Leipziger Straße, Kantstraße, Hauptstraße, Potsdamer Straße y Tempelhofer Damm. Antes de la introducción del límite de velocidad, el nivel de dióxido de nitrógeno se situaba entre 41 y 51 microgramos por metro cúbico. La evaluación de la prueba modelo mostró una reducción del contaminante de una media de 3,8 microgramos por metro cúbico de aire. Sólo en la Potsdamer Strasse no se detectó reducción alguna. Esto podría deberse al hecho de que, debido al gran volumen de tráfico de esta carretera, la gente ya apenas conducía a más de 30 km/h. Para estar seguros de que la disminución de contaminantes no se debía a un parque automovilístico más limpio en general, las emisiones contaminantes también se midieron en tramos de carretera en los que el límite de velocidad es de 50 km/h. Las rutas de prueba, por cierto, siguen estando todas limpias.
Por cierto, todas las rutas probadas siguen siendo zonas de velocidad 30. Además, se añadirán otros tramos de carreteras principales. Queda por ver si las medidas serán suficientes para evitar las prohibiciones de circulación en el futuro.
En Bruselas, lleva un año en vigor un límite de velocidad de 30 km/h en toda la ciudad, y los resultados son convincentes: un 50% menos de víctimas mortales de tráfico, un 20% menos de heridos graves y una reducción a la mitad de los niveles de ruido. Sólo por esta razón, las zonas de 30 km/h son una ventaja para todos los usuarios de la carretera.
Debido a los resultados positivos de las dos ciudades, DUH exige la ampliación del límite de velocidad a todas las ciudades alemanas.