La contaminación atmosférica está aumentando a un ritmo alarmante en todo el mundo, y la crisis climática desempeña un papel fundamental. Esta es la alarmante conclusión de un estudio de la empresa suiza Indice de Qualité de l'Air (IQAir). Las consecuencias para la salud son devastadoras: en los países más afectados, la esperanza de vida podría disminuir hasta seis años.
El estudio señala a Asia como el continente con los peores valores. 83 de las 100 ciudades más contaminadas se encuentran en la India, donde la contaminación atmosférica es diez veces superior a los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En Alemania existen grandes diferencias regionales, siendo el oeste y el centro del país donde se registran las mayores concentraciones de partículas.
¿Qué tienen en común estas regiones? Son regiones muy industrializadas con una elevada densidad de fábricas, automóviles y personas. La producción de bienes y servicios, el transporte y el consumo de energía provocan elevados niveles de emisiones contaminantes a la atmósfera. La crisis climática provocada por el hombre está acelerando este desarrollo al influir en los patrones meteorológicos y, por tanto, en la propagación de los contaminantes.
Es evidente que hay que encontrar soluciones urgentemente. Una opción sería crear nuevas zonas de bajas emisiones en las que se controlen estrictamente las emisiones contaminantes. Esto podría lograrse mediante el uso de vehículos eléctricos, el fomento del transporte público y la restricción de las emisiones industriales. Sin embargo, cabe preguntarse si tales medidas bastan para reducir significativamente la contaminación atmosférica.
El estudio también pone de relieve una disparidad mundial en la investigación sobre la calidad del aire. Muchas zonas de África, Sudamérica y Oriente Medio carecen de estaciones de control del aire y, por tanto, de datos. Se necesitan mejoras urgentes para conocer el alcance total de la contaminación atmosférica en estas regiones.
Los resultados del estudio IQAir son preocupantes y alarmantes: ¡la contaminación atmosférica es y sigue siendo un grave problema!