Autobuses eléctricos desarrollados en África para África. La empresa "ROAM" pretende llevar a las carreteras del continente soluciones de movilidad ambiental y socialmente responsables y garantizar un giro socioecológico.
En muchas ciudades africanas, los autobuses son el medio de transporte más utilizado. Es una tendencia positiva, pero también tiene sus desventajas. Los autobuses utilizados hasta ahora han sido todos de gasóleo, lo que, por supuesto, ha resultado muy perjudicial para el medio ambiente y el aire. Por este motivo, el fabricante keniata-sueco Roam entra en el mercado e introduce un nuevo e-bus, el modelo Rapid.
El Rapid e-bus, de 12,5 metros de longitud y cuya primera versión se presentó el pasado enero, está diseñado para transportar hasta 90 pasajeros con una autonomía de unos 360 kilómetros. Después hay que recargar la batería, con un proceso de carga que debería durar un máximo de dos horas. Sin embargo, garantizar un suministro eléctrico suficiente para los puntos de recarga sigue siendo un problema. En el continente africano, como en muchos otros países del mundo, el auge del mercado de vehículos eléctricos suele poner al límite las redes eléctricas disponibles.
Sin embargo, lo especial del nuevo vehículo es la regionalidad perseguida por la empresa en los procesos de desarrollo y construcción. Junto con socios locales, ROAM se esfuerza por diseñar y, posteriormente, fabricar en la medida de lo posible directamente en Kenia, al menos según su propia información. Esto permite crear más puestos de trabajo locales y contrarrestar así, al menos en parte, la creciente tasa de desempleo del país. El cambio a una propulsión eléctrica también permite una reducción de los costes de explotación de alrededor del 50%, lo que en términos concretos significa mayores márgenes de beneficio para el operador, pero también precios más bajos para los clientes.
Además del impacto positivo desde el punto de vista socioeconómico, el autobús Rapid es bueno para el medio ambiente. El principal objetivo del fabricante es introducir una nueva generación de autobuses eléctricos en África, haciendo que ciudades como Nairobi sean más silenciosas y limpias. Al mismo tiempo, la empresa espera que el nuevo autobús ecológico mejore la percepción que el público tiene del transporte público. Ya no sólo porque se les considera el medio de transporte más barato o a veces el único disponible, sino también por su impacto positivo en la economía africana y el medio ambiente.
Según el coordinador del proyecto, Dennis Wakaba, la solución que ofrece ROAM es especialmente viable porque es "integradora, moderna, eficiente y sostenible". Es una buena noticia porque, al fin y al cabo, la contaminación ambiental es un problema mundial. Más que nunca, es importante ofrecer soluciones de movilidad más sostenibles que tengan en cuenta simultáneamente el medio ambiente y las comunidades afectadas, tanto en África como en el resto del mundo. El "Proyecto Rapid" parece un buen punto de partida.